El operativo fue liderado por el alcalde Galán y contó con apoyo interinstitucional
Dos establecimientos nocturnos en la calle 84 de la localidad de Chapinero fueron sellados preventivamente durante un operativo de control de ruido liderado por el alcalde Carlos Fernando Galán. La intervención, adelantada por la Secretaría de Ambiente con el respaldo de entidades del Distrito, tuvo como objetivo verificar el cumplimiento de las normas ambientales en zonas de alta actividad nocturna.
Los bares sellados, identificados como Licoexpress y El Andén Cantina, no contaban con medidas adecuadas de insonorización ni cumplían con los requisitos técnicos exigidos en los alistamientos acústicos. Según el informe de la Secretaría de Ambiente, los establecimientos fueron sancionados por superar los niveles de ruido permitidos y no haber implementado correctivos previos. En consecuencia, no podrán reabrir hasta demostrar que han realizado las adecuaciones necesarias.
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Estas acciones se amparan en la Ley 2450 de 2025, conocida como la Ley Antirruido, que otorga a las autoridades ambientales y de policía la facultad de sellar o incluso ordenar el cierre definitivo de un establecimiento que persista en violar los límites sonoros. La norma establece medidas preventivas, sanciones económicas y plazos para el diseño de planes de acción territorial orientados a reducir la contaminación acústica en zonas mixtas, como Chapinero, donde coexisten usos residenciales y comerciales.
Además del sellamiento, la ley permite imponer multas a los negocios que excedan los límites de ruido, y obliga a los gobiernos locales a desarrollar en un plazo máximo de 18 meses un plan para gestionar esta problemática. “Le vamos a poner orden a la problemática del ruido en Bogotá, mi ciudad, mi casa”, afirmó Adriana Soto, secretaria de Ambiente, al señalar que estas intervenciones buscan proteger el derecho a la tranquilidad de los ciudadanos.
El operativo fue acompañado por la Secretaría de Gobierno, la Policía Metropolitana, la Personería Distrital, la Alcaldía Local de Chapinero y otras dependencias. La medida se suma a otras intervenciones similares realizadas en semanas anteriores en la misma zona, lo que demuestra la continuidad de la estrategia del Distrito frente a una de las principales quejas de la ciudadanía: el ruido en sectores de entretenimiento.
La Ley Antirruido también contempla la regulación de niveles sonoros en áreas consideradas de alta sensibilidad como hospitales, bibliotecas y zonas residenciales. En el caso de las actividades comerciales como bares, discotecas y restaurantes, los empresarios deben cumplir con estrictos parámetros de mitigación. De no hacerlo, arriesgan no solo sanciones económicas, sino el cierre definitivo del negocio si reinciden. Con estos operativos, la administración busca reforzar la convivencia urbana y avanzar en la construcción de entornos más equilibrados para todos.
Foto: Secretaría de Ambiente.
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