Del 10 al 12 de mayo el Claustro de Usaquén (Cra. 6 No. 118-40) será escenario del Bogotá Coffee Fest, donde se reunirán en un mismo espacio todos los eslabones de la cadena productiva del café, desde el productor hasta el consumidor final
Revista Buen Gusto habló con Lucía Londoño, directora de este evento, que tiene como objetivo de acercar a los capitalinos a su bebida nacional para que se acerquen a aprender un poco más de cómo apreciar, preparar e identificar un buen café.
Buen Gusto: ¿Cómo surge la iniciativa de hacer en Colombia un Coffee Fest?
Lucía Londoño: “Yo llevo aproximadamente 15 años vinculada en el mundo del café. Hoy trabajo con aproximadamente 60 marcas de pequeños caficultores, que aún con un producto de excelente calidad, no saben a quién se lo pueden vender.
La idea, entonces, no es solo visibilizarlos, sino que podamos conectar al consumidor final con toda la cadena de producción y de comercialización de café.
Aquí tenemos eventos especializados para los catadores, para los baristas, para los caficultores, pero para el consumidor final no hay. Los ´Coffee Fest´ son eventos que se realizan en muchas ciudades importantes del mundo”.
Buen Gusto: ¿Cuánto tiempo llevas planeando este evento?
Lucía Londoño: “Este es un sueño que tengo desde hace unos tres años. Personalmente estuve en New York conociendo el evento que hacen allá, pero ha sido un reto enorme”.
Buen Gusto: ¿Con qué se va encontrar el asistente al evento?
Lucía Londoño: “Debemos hacer una clara diferenciación, entre los buenos cafés y los demás. Los cafés económicos son subproductos, eso realmente no es café.
Lo que queremos hacer es mostrarle a la gente qué es un buen café, no estamos hablando de productos costosos necesariamente, son productos que arrancan desde los 12 mil pesos.
Este es entonces un evento de entrada gratuita, para todo el mundo; no es elitista, clasista, ni de cafés especiales de 30 mil pesos. Son aproximadamente 45 expositores. Tendremos un taller de filtrados para responder las preguntas más frecuentes y un salón de catación para no conocedores, porque queremos que la gente entre, juegue y aprenda”.
Buen Gusto: ¿qué tanto ha crecido la cultura del café en Colombia?
Lucía Londoño: “La cultura de café en el país ha crecido mucho. Cuando yo empecé hace 15 años las marcas de café de buena calidad éramos unas cinco. Ahora, yo solamente tuesto 60. No solamente hay un mayor interés por buen café sino una mayor necesidad de ubicar esos cafés en el consumidor final
En el consumidor hay un mayor interés en conocer, aprender, acercarse. Hay mayor curiosidad, los jóvenes son curiosos y quieren aprender, conocer las variedades, cómo se prepara, cómo se toma. Eso es lo que queremos visibilizar en este evento”.
Buen Gusto: ¿Cada cuánto se realizará el evento?
Lucía Londoño: “El evento en Bogotá lo deberíamos hacer al menos una vez al año. Tenemos confirmado hacerlo también en Santa Marta, Neiva; estamos gestionando en Ibagué y Manizales, esto es una necesidad en todo el país.
Buen gusto: ¿Cuáles son tus recomendaciones para mejorar la experiencia del café?
Lucía Londoño: “Cuando tomamos un producto de mala calidad, que tiene grandes descompuestos, nos hace daño. Por ejemplo, la generalidad de ir al médico y que nos quite el café, es porque estamos tomando café de mala calidad o cafés recalentados.
Respecto a la compra compra, es preferible comprar el café en grano. Es como cuando haces un jugo de naranja, siempre nos gusta de naranjas recién exprimidas; con el café pasa lo mismo.
Ahora, lo que daña el café es el oxígeno. Siempre debemos tener la bolsa bien cerrada y no hace falta meterlo a la nevera. Una vez abierto, consumirlo en el menor tiempo posible.
Por su parte, el café nunca debe estar en contacto con el agua por más de cinco minutos, pues después se empieza a extraer el amargo. Sin importar el método de preparación, son cinco minutos máximos de contacto con el agua, previamente hay que separarlo, colarlo.
Buen Gusto: ¿Cómo conseguir un buen café?
Lucía Londoño: “Para conseguir un buen café, yo recomiendo hacer relación directamente con tiendas de café, o con tostadoras de café, que entregan los cafés recién tostados a domicilio”.