El vino, más allá de ser la bebida más socializadora inventada hace milenios por el hombre, es un viaje infinito y enriquecedor de vivencias, sensaciones, historias y descubrimientos.
Es un trayecto personal que depende del interés y la entrega a su itinerario; puede ser corto y liviano o extenso y exuberante. Requiere, como la vida misma, de guía y orientación; de una invitación a la travesía, de un relato que motive y una historia que incite a seguir su ruta, porque cuanto más vasto y variado sea el camino, nunca dejaremos de aprender y más amaremos el vino.
Las vivencias del vino pueden crecer a lo largo de una experiencia permanente, y una inquietud por el descubrir. Desde botellas, hasta viñedos, regiones, países, personalidades e historias, que comparten esa riqueza singular con generosidad.
Para Mauricio, autor del libro «Yo, el vino», no basta con ser especialistas; es más gratificante ser educador y portador de un mensaje lleno de cultura.
Él es un viajero incansable en el mundo del vino. Profesor en la Facultad de Administración Empresas Turísticas y Hoteleras de la Universidad Externado y experto en la gestión de alimentos y bebidas.
En su nueva obra, comparte su vasta experiencia y conocimientos. Se trata de una publicación rica y original, que surge de decenas de vivencias, análisis, catas, lecturas y encuentros, y promete ser una referencia indispensable para fomentar la cultura del vino y una invitación a comprender mejor su mundo y su importancia universal.
¿Qué te inspiró a escribir «Yo, el vino» y qué esperas que los lectores obtengan de esta obra?
Mi inspiración para escribir «Yo, el vino» proviene de mi profundo amor y dedicación por esta bebida que ha sido una constante en mi vida.
¿Cómo surgió la idea de escribir tu último libro «Yo, el vino»?
La idea del libro surgió de mi larga trayectoria en el mundo del vino y la hostelería. Después de años de experiencia y de compartir mi pasión por el vino con mis alumnos y colegas, sentí que era el momento de plasmar todo ese conocimiento en una obra que pudiera servir de guía y motivación para aquellos que desean adentrarse en este fascinante mundo del vino.
¿Por qué decidiste titularlo «Yo, el vino»?
El título «Yo, el vino» tiene un significado simbólico muy importante para mí. En primer lugar, hace referencia a la idea de que el vino puede hablar en primera persona, como lo hacían los reyes en los decretos antiguos.
Además, representa la conexión personal que cada individuo puede tener con esta bebida milenaria, ya que el vino es mucho más que una simple bebida: es un acompañante en la vida, un testigo de momentos importantes y un elemento que enriquece nuestras experiencias.
¿Cómo fue el proceso de publicación de esta obra?
No fue fácil. Fue un proceso largo y desafiante. Empezando por un percance importante cuando perdí parte del manuscrito debido a un problema con mi computadora. Esto ocurrió a finales de 2022, y por un momento pensé en abandonar el proyecto. Sin embargo, gracias al apoyo de mi esposa y a mi determinación, decidí reconstruir todo desde cero y continuar con el proceso de elaboración del libro. Fue un desafío, pero estoy muy contento de haberlo superado y de haber podido completar esta obra que considero tan importante.
Centrándonos en el contenido del libro. ¿Cuál dirías que es la contribución más relevante que este libro ofrece a los profesionales de la industria de la hospitalidad y la gestión de alimentos y bebidas?
Creo que una de las contribuciones más importantes del libro es la orientación que ofrece para aquellos que desean incorporar el vino en su oferta gastronómica.
No se trata solo de seleccionar vinos, sino de comprender toda la complejidad que implica su manejo, desde la compra y el almacenamiento hasta la comercialización y la creación de cartas de vinos adecuadas.
Además, el libro aborda temas como la historia del vino, su relación con la salud y aspectos geográficos que son fundamentales para comprender este mundo.
Creo que es una guía completa para enriquecer la cultura del vino y ayudar a los profesionales a mejorar su desempeño en este ámbito.
¿Hay algún mensaje que sea crucial en tu obra, «Yo, el vino»?
En la publicación quise transmitir la idea de que el vino es mucho más que una bebida; es un universo fascinante lleno de historia, cultura y experiencias inolvidables.
Espero que este libro sirva como una invitación a explorar y disfrutar de todo lo que el mundo del vino tiene para ofrecer, y que inspire a los lectores a profundizar en su conocimiento y apreciación de esta maravillosa bebida.
Ahora bien, ¿cuál crees que es el aspecto más importante que los lectores deben tener en cuenta al adentrarse en el mundo del vino?
Creo que es fundamental tener una mente abierta y estar dispuesto a aprender y explorar. El vino es un universo vasto y diverso, y cada botella cuenta una historia única.
Es importante estar atento a los detalles, desde el origen de las uvas hasta las técnicas de producción, para poder apreciar plenamente todo lo que esta bebida tiene para ofrecer.
¿Y cuál es el rol que tienen las historias en tu escrito?
Creo que el vino es un tema tan vasto y rico que siempre hay algo nuevo por descubrir y compartir. Es por eso que me gusta plantear conversaciones en las que podamos intercambiar ideas y aprender unos de otros. Además, las anécdotas son una forma maravillosa de conectar con las personas y hacer que el tema sea más accesible y entretenido.
El libro se puede adquirir aquí