Entre enero y mayo de 2024, los ingresos reales de los hoteles bajaron 6.1%, en comparación con el mismo periodo del año anterior.
La industria hotelera en Colombia enfrenta un panorama desalentador, tras la caída tanto en la ocupación como en los ingresos reales, según revelan los últimos resultados de la Encuesta Mensual de Alojamiento (EMA) del Dane. Estos indicadores reflejan un continuo descenso, evidenciando que la esperada reactivación económica aún no se materializa.
Durante los primeros cinco meses de 2024, los ingresos reales de los hoteles disminuyeron un 6,1% en comparación con el mismo período de 2023. Paralelamente, la ocupación hotelera nacional cayó al 48,9%, una baja de 3,2 puntos porcentuales respecto a 2022 y de 2,5 puntos porcentuales frente a 2023. Esta situación ha encendido las alarmas en el sector turístico, que lucha por recuperar los niveles previos a la pandemia.
José Andrés Duarte, presidente ejecutivo de Cotelco, advirtió sobre la gravedad de la situación: “Todavía no se observa la reactivación económica. Los primeros cinco meses de 2024 muestran un balance negativo respecto a los mismos periodos de los dos años anteriores. El escenario es preocupante”. Duarte también señaló que la falta de reactivación del consumo doméstico está afectando gravemente a los establecimientos formales de alojamiento y hospedaje.
La informalidad y la «parahotelería», en crecimiento a nivel nacional, suman presión a los hoteles formales, que ya enfrentan menores ingresos y tasas de ocupación. Esta competencia desleal agrava aún más la crisis en el sector, dificultando la recuperación.
San Andrés y Providencia son las regiones más afectadas, con una disminución de 12,5 puntos porcentuales en la ocupación hotelera respecto a 2022. Otras regiones como los Santanderes (-8,4 p.p.), Antioquia (-6 p.p.), Cartagena (-4,7 p.p.) y la Región Central (-4,4 p.p.) también presentan caídas significativas. Comparado con 2023, los Llanos Orientales (-5,8 p.p.), Antioquia (-5,3 p.p.), la Región Central (-4,2 p.p.) y los Santanderes (-3,1 p.p.) encabezan las mayores disminuciones.
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Los ingresos reales también han caído drásticamente en varias regiones entre enero y mayo de 2024, superando incluso la caída nacional. Los Llanos Orientales (-14,4%), Antioquia (-11,4%), el Caribe (-7,3%), Cartagena (-7,2%) y los Santanderes (-6,5%) enfrentan las mayores reducciones.
A pesar de un leve crecimiento en ingresos en San Andrés y Providencia, la ocupación sigue siendo baja, lo que indica que 2023 fue un año particularmente crítico para el archipiélago. La lenta implementación de nuevas rutas aéreas y el bajo consumo doméstico continúan afectando la recuperación de estos destinos.
La situación del sector hotelero en Colombia sigue siendo preocupante. La falta de reactivación del consumo doméstico y los altos niveles de informalidad complican el panorama para los establecimientos formales. La industria requiere medidas urgentes para revertir esta tendencia negativa y fomentar una recuperación sostenida.
Con información de: El Colombiano
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