Casa República, una emblemática casona neoclásica se renueva con un proyecto gastronómico de gran envergadura.
Con una inversión inicial de 5.000 millones de pesos y proyecciones de alcanzar los 15.000 millones en los próximos años, Adriano, el primer restaurante del espacio, busca posicionarse como un referente en la gastronomía española moderna, fusionando arte, cultura y diseño.
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El grupo detrás de esta ambiciosa propuesta está conformado por Nicolás Vergara, Ana María Calle, Lina Salazar, David Simpson y el chef Felipe Giraldo.
Su visión trasciende lo culinario: buscan preservar el patrimonio histórico de la casona, transformándola en un espacio vibrante que combine tradición e innovación. Según Nicolás Vergara, socio fundador, “Adriano representa el espíritu de Casa República: calidad, autenticidad y una experiencia inolvidable”.
Un proyecto con impacto económico y cultural
La restauración de Casa República no solo implicó la apertura de un restaurante, sino la activación de un espacio cultural multifacético que generará empleo y dinamizará la economía local. En su primera fase, Adriano ha creado más de 100 empleos directos, cifra que podría incrementarse a 250 con la apertura de nuevos restaurantes dentro de la casona.
El diseño del espacio ha sido cuidadosamente planeado para preservar su arquitectura histórica, integrando elementos contemporáneos como las instalaciones lumínicas de la artista Venus White. Según Lina Salazar, socia del proyecto, “queríamos que cada detalle de Adriano reflejara historia, pero que también se sintiera fresco y moderno”.
La propuesta gastronómica: una mirada moderna a la cocina española
Adriano se inspiró en la gastronomía española moderna, con influencias de ciudades como Madrid y Barcelona, adaptadas al contexto colombiano. La carta, diseñada por el chef Felipe Giraldo, combina ingredientes locales con técnicas tradicionales, ofreciendo una experiencia culinaria tanto innovadora como auténtica.
El menú incluye 16 entradas diseñadas para compartir, como las tradicionales papas bravas y las tostadas de pan brioche con paté de pollo confitado y durazno. Entre los platos principales destacan el cochinillo confitado y los langostinos en salsa cremosa, que reflejan el enfoque en la cocina lenta y cuidadosa.
En cuanto a las bebidas, Adriano ofrece una selección de cócteles clásicos y de autor, como el Español 75, inspirado en el cava y sabores frescos, y los Molts, cócteles sin alcohol diseñados para realzar los sabores de cada plato
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